Nació en Dueñas (Palencia) el 6 de enero de 1827. Fueron sus padres Juan Cano, corregidor de la villa palentina, y Vicenta Rojo.
Su ingreso en la Orden Agustiniana tuvo lugar el 24 de julio de 1842 en el Real Colegio Seminario de Valladolid al endosarle la cogulla de novicio. Su profesión de votos solemnes la recibió el 25 de julio de 1843 el rector fray Antonio López.
El 27 de febrero de 1845, inconclusa la carrera eclesiástica, siendo sólo “filósofo y de grados”, salió desde el puerto de Santander en la fragata Arispe con rumbo a Filipinas. En el convento de Manila culminó sus estudios teológicos y recibió los ministerios sagrados.
Su primer destino fue la provincia de Ilocos. Allí fue misionero en Bucay (1850-1851) y Pidigan (1851-1852), y luego pasó a regentar las parroquias de Bauang (1852-1857) y Namacpacan (1857-1861).
En 1861 fue elegido secretario provincial (1861-1865). Fueron estos años más de burocracias y papeleos, dejando al margen la acción pastoral, los que despertaron su vocación histórica, fruto de la cual nació su obra Catálogo de los Religiosos. Los comicios celebrados en enero de 1865 le asignaron la doble tarea de definidor provincial (1865-1869) y prior vocal de Candon (1865-1893). Retirado y venerable en este pueblo ilocano, murió el 13 de septiembre de 1896.
Entre los filipinólogos y agustinos el padre Gaspar Cano es conocido principalmente por su obra publicada el año 1864. Del citado Catálogo el padre Santiago Vela escribe que es “obra de no poco trabajo y gran interés, en la que, a más de las noticias biográficas más importantes de cada religioso, se especifican los trabajos científicos y literarios de los mismos, así como las obras materiales llevadas a cabo en los pueblos por ellos administrados”.
Otros autores son del parecer de que el padre Cano se sirvió en su mayor parte del manuscrito del padre Agustín María de Castro, que existía en el convento de Manila, titulado Osario venerable y que vio la luz en 1954. No se niega veracidad a tal sentencia, aunque bien se cree que el padre Cano, siendo secretario de provincia y obrando en su poder muchos documentos y listas de religiosos con memorias de los pueblos administrados, de ellos entresacó noticias estimables que hasta entonces nadie había aireado. Incluye, asimismo, copiosas noticias bibliográficas. Sí habría que censurarle el no haber dado a ciertas biografías mayor extensión, pero hay que reconocer que aumentó con creces el número de aquéllas, que en modo alguno se encontraban en el Osario, y que además, con muy buen criterio omitió asertos peregrinos.
El padre Cano clasifica su libro según el orden de misiones que fueron arribando a las Islas Filipinas, método que más tarde fue adoptado por el agustino Elviro Jorde. En general hay que advertir que el padre Cano es bastante exacto en sus afirmaciones, si bien habría que censurarle el omitir detalles y documentos importantes cuya inserción hubiera sido capital, dado que muchos de éstos han desaparecido tras revoluciones y guerras.
Obra
Catálogo de los Religiosos de N. P. S. Agustín de la Provincia del Smo. Nombre de Jesús de Filipinas desde su establecimiento en estas Islas hasta nuestros días, con algunos datos biográficos de los mismos, Manila, Imprenta Ramírez y Giraudier, 1864.
Bibliografía
E. Jorde, Catálogo bio-bibliográfico de los religiosos agustinos de la Provincia del Santísimo Nombre de Jesús de las Islas Filipinas desde su fundación hasta nuestros días, Manila, Colegio de Santo Tomás, 1901, págs. 463-464; A. Blanco, Biblioteca bibliográfico-agustiniana, Valladolid, José Manuel de la Cuesta, 1909, págs. 463-464; G. de Santiago Vela, Ensayo de una biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín, I, Madrid, Imprenta del Asilo de huérfanos del S. C. de Jesús, 1913, pág. 599; A. Renedo, Escritores palentinos. Datos bio-bibliográficos, I, Madrid, Imprenta Helénica, 1919, pág. 122; M. Merino, Agustinos evangelizadores de Filipinas (1565-1965), Madrid, Archivo Agustiniano, 1965, pág. 390; I. Rodríguez, Historia de la Provincia Agustiniana del Smo. Nombre de Jesús de Filipinas, IV, Manila, Estudio Agustiniano, 1968, págs. 79-82; E. Arsenio Manuel, Dictionary of Philippine Biography, III, Quezón City, Filipiniana Publications, 1986, págs. 111-112; I. Rodríguez y J. Álvarez, Al servicio del Evangelio. Provincia Agustiniana del Santísimo Nombre de Jesús de Filipinas, Valladolid, Estudio Agustiniano, 1996, págs. 231-232.