Zumel, Francisco

Teólogo mercedario ingresa en el convento de Salamanca, donde profesa en 1562. En 1561-62 comienza sus estudios en la universidad de esta ciudad, ordenándose de sacerdote por el año 1562. Oposita, junto con fray Luis de León, y gana la cátedra de Artes en la universidad de Salamanca en 1570. Explica, sucesivamente, Física, Lógica, Metafísica y Filosofía Moral, cátedra esta que ganó en 1580. En 1582 preside un acto de Teología que será el primer encuentro que dará lugar a la famosa controversia De auxiliis. Fue decano de la universidad de Salamanca. Dentro de la Orden tuvo puestos relevantes: rector de colegio de Alcalá y juez conservador de aquella Universidad a los 27 años; rector de teología de Vera Cruz, de Salamanca; provincial de Castilla y Portugal y de las islas del Mar Océano 1585; definidor provincial 1588; comendador de Salamanca 1591; en el Capítulo general de Calatayud 1593, Felipe III, en una carta, lo propone para general, y el mismo rey lo nombró visitador de los Colegios Mayores del reino. Tomó parte activa y principalísima en la nueva codificación de las Constituciones de la Merced que se conocen con el nombre de zumelistas. Silvestre Saavedra le llama “el príncipe de la escuela tomista”.

Su obra debe encuadrarse dentro de la tradición escolasticismo clásico, aun cuando algunas de sus teorías tienen un matiz original, como es el caso de su análisis del concepto de libertad. Su más aportación teórica se sitúa en la llamada controversia de auxiliis,  que planteaba los principios de libertad de los actos humanos en su relación con la omnipotencia divina. Zumel se adscribe a la postura planteada por Domingo Bañez, defendiendo el concepto de premonición física. Sin embargo, Zumel no es tan radical como Bañez al fundamentar el carácter voluntario de los actos humanos en la voluntad de Dios.