Francisco Blanco Salcedo, conocido como "Beato Capillas" nace en Capillas (Palencia) en 1512, y fallece en Santiago de Compostela en 1581. Profesor de Teología, Representante en el Concilio de Trento; Obispo de Orense y Arzobispo de Santiago de Compostela.
Biografía
Tras recibir en Capillas su educación básica, se trasladó a Salamanca para realizar estudios de Filosofía y Teología. En 1538 figura como alumno en el Colegio Mayor de Santa Cruz de Valladolid. Aquí sería ordenado sacerdote y empezó a ejercer como tal en la diócesis de León. Paso luego a impartir la cátedra de Teología (Vísperas) en la Universidad de Valladolid. En 1554, por oposición, obtiene las canonjías magistrales, primero en Oviedo y después en Palencia, siendo llamado, gracias a sus dotes intelectuales y su sólida formación religiosa, como teólogo profesor al servicio del príncipe Felipe. Ya coronado como rey Felipe II, éste le propuso al Papa Paulo IV para la sede de Orense y, una vez confirmada la provisión en Roma, Blanco Salcedo inició su obispado el 5 de agosto de 1556.
En 1561, gracias a sus cualidades como teólogo y orador, fue designado para participar en el Concilio de Trento a donde llegó, con el grupo español, el 19 de noviembre, permaneciendo allí hasta la clausura de la asamblea. Intervino en las sesiones con brillantez, defendiendo el llamado “derecho divino” de los obispos y el de la residencia. Abogó decididamente por la reforma de la Iglesia y se pronunció lúcidamente en algunas de las cuestiones más importantes que se discutieron en las reuniones.
El obispo Blanco Salcedo regresó a España en 1563 y, dos años más tarde, Felipe II lo propuso para el obispado de Málaga en cuya ciudad entró como tal el 26 de septiembre de 1965. Tras la preceptiva visita pastoral, contribuyó con sus rentas a diversas fundaciones en la ciudad (Hospital de Convalecientes y ermita de San José). La sublevación de los moriscos, atrincherados en el Peñón de Frigiliana provocó una sangrienta batalla el 11 de julio de 1569. Durante su gobierno, se estableció en Málaga el Colegio de la Compañía de Jesús, inaugurado en 1573 y construido gracias a las donaciones episcopales, para la educación de niños y jóvenes. Las clases de Gramática, fueron dotadas por el obispo y en 1579 comenzaron las de Latín y Retórica.
Siguiendo las directrices marcadas en Trento, Blanco Salcedo, convocó un Sínodo, con el fin de tratar asuntos concernientes al clero y a la comunidad de fieles. El Sínodo se celebró el 11 de noviembre de 1572 y sus “Constituciones” fueron publicadas en Granada un año más tarde. En ellas se trató de corregir los abusos que se habían introducido en la diócesis por las decretadas por el anterior obispo. Para ello se reguló la vida y honestidad de los clérigos, estableciendo los diezmos y primicias de la Iglesia. Se elaboró una tabla de delitos y penas y se regularon las sentencias de los jueces.
En 1574, Felipe II propuso a Blanco como arzobispo de Santiago de Compostela, el Papa Gregorio XIII lo confirmó en junio y el 2 de septiembre de 1574, entró en la ciudad gallega como tal. Convocó el Sinodo correspondiente, especialmente para tratar la residencia de los párrocos para que no abandonasen tanto tiempo las parroquias. En 1576 fundó el Hospital de San Roque para enfermos de peste e igual que lo había hecho en Málaga autorizó y patrocinó la construcción de un Colegio de la Compañía de Jesús que se inauguró el 3 de agosto de 1579. Por su edad solicitó al Rey y al Papa que se de sus obligaciones. No admitieron su renuncia pero el 26 de abril de 1581 falleció y fue enterrado en un mausoleo construido en la moderna Iglesia de la Compañía.
Obra
“Constituciones Synodales del obispado de Málaga” (granada, 1573); “Suma de la doctrina christiana para que los curas y rectores la enseñen a sus feligreses los domingos y las fiestas” (1577): “Memorial para que los curas y rectores estén advertidos de algunos yerros y descuidos que suelen acontecer en el oir confesiones”; “Constituciones sinodales del Arçobispado de Sanctiago” (Madrid, 1579); “Advertencias y mandatos de D. Francisco Blanco arzobispo de Santiago para que los curas y rectores de su arzobispadoexerciten mexor sus oficios” (Madrid, 1587).”Discurso de Coro y Oficio Divino” (1608).
Bibliografía
Diccionario de la Historia Eclesiástica de España”,vol. I.- Madrid, CSIC, 1972